Usos del Galvanizado

La corrosión es un proceso natural que afecta a los metales comunes (no nobles), transformados por el hombre para producir un metal útil. La corrosión del acero es causada por su exposición a otros metales en presencia de un electrolito o al oxígeno y agua. Al poner una barrera para cubrir el acero, el galvanizado es capaz de resistir mejor los agentes destructivos que actúan contra el acero.

La función del galvanizado es proteger la superficie del metal sobre el cual se realiza el proceso. Aunque esta capa de galvanizado se puede deteriorar con el tiempo, el proceso de galvanizado es un recurso útil para evita la corrosión y prolongar la vida del acero. Para evitar la corrosión en general es fundamental evitar el contacto entre materiales disímiles, con distinto potencial de oxidación, que puedan provocar problemas de corrosión galvánica por el hecho de su combinación.

Lámina Galvanizada

Una lámina galvanizada es una lámina de acero que ha sido sometida a un proceso de recubrimiento de zinc. El proceso de producción de una lámina de acero galvanizada implica comúnmente la inmersión de la lámina en zinc muy caliente. El recubrimiento de zinc reacciona con el oxígeno para crear óxido de zinc, que reacciona con agua, produciendo hidróxido de zinc. Con el tiempo, hidróxido de zinc reacciona con el dióxido de carbono y el carbonato de zinc forma una capa gris que ayuda a disminuir la velocidad de reacción del zinc y ayuda a proteger el acero.

Tipos de Galvanizado

En el galvanizado en caliente primero que nada se pasa la pieza a galvanizar por un proceso exhaustivo de limpieza química (desengrase, decapado en ácido clorhídrico, fluxado en baño de sales y secado), para terminar con un baño de zinc fundido, a 440ºC para lograr un contacto óptimo de los metales. El galvanizado en frío es una aplicación de pintura con alto contenido de zinc en película seca. Se debe aplicar sobre superficies de acero previamente tratados (arenados o granallados) dependiendo del tipo de exigencia y uso. Se deposita una capa de zinc (Zn) sobre hierro (Fe). Es el método más sencillo y puede aplicarse fácilmente con métodos convencionales de pintado (brocha, pistola o rodillo).

Existen muchos tipos de galvanizados en frío, dependiendo del tipo de resina y polímero que se elabora es su uso y resistencia: Los galvanizados en frío alquídicos son usados para pequeñas reparaciones y uso común de mediana a baja exigencia. Los galvanizados en frío epóxicos son utilizados donde se requiere resistencia química y alta protección corrosiva. Los galvanizados en frío etil-silicatos son utilizados en sectores de gran humedad, en lugares de gran exigencia corrosiva y bajo inmersión de agua. Los últimos dos, epoxico y etil-silicato deben ser recubiertos con un producto de terminación (Top Coat), un producto Poliuretano, un producto Epóxico al agua o acrílico al agua.

Aplicaciones

El Galvanizado tiene un sin número de aplicaciones: Se usa en la construcción, en automóviles, en la fabricación de herramientas. En tuberías para la conducción de agua cuya temperatura no sobrepase los 60 °C, ya que entonces se invierte la polaridad del zinc respecto del acero del tubo y este se corroe en vez de estar protegido por el zinc. Otros procesos de galvanizado muy utilizados son los que se refieren a piezas decorativas: bisutería, hebillas, botones, llaveros, artículos de escritorio y un sinfín de productos, que son bañados en oro, cobre, níquel, plata, oro, bronce, cromo, estaño, etc.

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